Insomnia: LOS CREYENTES

los espíritus los ayudan

atraviesan las paredes

Dios no puede salvarte

la Iglesia no puede salvarte

¡se te meten en el cuerpo!

no puedes frenarlos

pueden meterse en cualquiera

¡pueden matar a quien sea!

una religión llamada Santería

degüellan gallinas, hacen magia...

La santería es mil años más antigua que el cristianismo y llegó al Caribe con los esclavos.

Los dioses africanos se asemejan a los santos católicos.

Santería, ("El Camino de los Santos") también llamada La Regla de Ocha ("La Orden de los Orishas") o La Religión Lucumí ("La Orden de Lucumí"), el nombre más común dado a una tradición religiosa de origen africano que se desarrolló en Cuba y luego se extendió por América Latina y Estados Unidos.

Pintura de una subasta de esclavos en Cuba. La mayoría de los elementos de la santería provienen de ideas religiosas.

La santería fue traída a Cuba por la gente de las Naciones yorubas de África Occidental, que fueron esclavizadas en gran número en las primeras décadas del siglo XIX. El nombre “Santería” deriva de las correspondencias que hacían algunos devotos entre las deidades yoruba llamadas orishas y los santos (santos) de piedad católica romana. Muchos practicantes contemporáneos se refieren a la tradición como “la religión de los orishas” o la “religión lukumi”, por el nombre con el que se conocía a los yoruba en Cuba.

Día de Reyes, Federico Mialhe. La Habana, Cuba alrededor de 1850. Celebraciones del Carnaval afrocubano.

La santería se basa en el desarrollo de relaciones personales a través de la adivinación, el sacrificio, la iniciación y la mediumnidad entre los practicantes de la religión y las deidades orisha, quienes brindan a sus devotos protección, sabiduría y éxito y los guían en tiempos de angustia, crisis. Se cree que el acceso a los orishas se puede lograr a través de varios tipos de adivinación. En el oráculo de Ifá, por ejemplo, un sacerdote capacitado, un babalawo (“padre del misterio”), interpreta la caída de nueces de palma consagradas para revelar la respuesta de los orishas a la pregunta de un buscador. Las consultas de Ifá prescriben alguna forma de sacrificio a uno o varios de los orishas. Estas ofrendas pueden variar desde simples presentaciones ante altares domésticos hasta elaborados banquetes en honor de los orishas. Como resultado de estos intercambios ceremoniales, el oráculo a menudo determina que un orisha en particular ha reclamado al devoto como su hijo. Entonces se hacen los preparativos para la gran e irrevocable iniciación del devoto en los misterios de ese orisha. En la ceremonia de coronación, los símbolos del orisha patrón se colocan sobre la cabeza del devoto, y él o ella pueden entrar en trance ceremonial y convertirse en un médium para ese orisha. En los bailes de tambores llamados bembés, los devotos iniciados, ahora propiamente llamados olorishas, aquellos que “tienen el orisha”, pueden perder su conciencia ordinaria y manifestar la de sus orisha patrones. A través de los cuerpos de sus médiums, se cree que los orishas interactúan directamente con la congregación y sanan y profetizan para quienes se acercan a ellos.

LA HABANA, CUBA: La santería "babalawo" (sumo sacerdote) Juliano y el sacerdote Enrique posan el 21 de octubre de 1998 en el casco antiguo de La Habana, Cuba. Juliano sostiene un "Bakú" (bastón) y se arrodilla en frente a un cuenco lleno de tierra, ambos sirven para convocar al mensajero "santo" u "oricha" (deidad) Elegguá antes de despertar a los espíritus de los ancestros. Enrique tiene un "Tablero de Ifa" (una bandeja de adivinación) que los sacerdotes usan para responder las preguntas más importantes que les plantea la comunidad. La santería se desarrolló hace siglos en Cuba cuando los santos y las tradiciones católicas romanas se mezclaron con las deidades yoruba traídas por los esclavos de África occidental para proteger a los creyentes de la persecución. Hoy, la religión es parte visible de la escena callejera cubana, particularmente en las principales ciudades.

Desde la Revolución Cubana de 1959 hasta principios del siglo XXI, casi un millón de cubanos abandonaron la isla, llevando la religión orisha a ciudades de todo el continente americano, particularmente a Miami y Nueva York . La tradición también se extendió a otras comunidades latinas, afroamericanas y estadounidenses blancas. Aunque faltan datos del censo, es probable que los devotos iniciados se cuenten por decenas de miles y que aquellos que consultan a un orisha, en un momento u otro, se cuenten por millones.

La procesión anual de la Virgen de la Caridad en La Habana, 2018; en la religión de la santería, el santo patrón de Cuba se conoce como Ochun (también deletreado Oshun).

Los devotos ven la tradición Orisha como una religión mundial y han recibido reconocimiento público por sus logros espirituales. En 1993, la Corte Suprema de los Estados Unidos confirmó por unanimidad el derecho de los devotos a practicar el controvertido rito de sacrificio de animales en el caso Iglesia de los Lukumi Babalu Aye v. Hialeah. El Ejército de los EE. UU. y la Oficina Federal de Prisiones han incorporado ministerios orisha en sus capellanías. Músicos, pintores, escultores y escritores han encontrado en la tradición orisha fuentes de arte y orgullo africanos. Es probable que las tradiciones de Orisha continúen creciendo y sean reconocidas como una de las principales contribuciones africanas a la cultura mundial.